Civilizaciones ancestrales que dejan huella en el alma, en las entrañas… una chispa «divina» despierta el resurgir de lo vivido, el recuerdo vibra en el corazón y fluye la magia a través de los brazos, manos.. los medios instrumentales bailan al son de las memorias despiertas…
Suavidad, gracilidad, ligereza…
La naturaleza siempre forma parte, abraza ligeramente, embellece, con su sabiduría sabe de por sí cómo proceder y dar su lugar a todo lo demás.